Hotel Viñas de Lárrede
En la puerta del Pirineo aragonés, a 24 km de la estación de esquí más grande de España, Formigal-Panticosa, a 2 minutos de Biescas y a 5 minutos de Las Margas Golf Club, a 30 min. Del Parque Nacional de Ordesa, en un pueblo encantador junto al Gállego, Lárrede, se encuentra el hotel Viñas de Lárrede, bajo un precioso torreón vigía y frente a la joya del románico, la Iglesia de San Pedro.
Piscina exterior
Televisor
Minibar
Restaurante
Guarda esquís
Ascensor
Bar
Terraza - solarium
Wi-Fi gratuita
Spa
Parking
Jardín
Hotel Viñas de Lárrede
En la puerta del Pirineo aragonés, a 24 km de la estación de esquí más grande de España, Formigal-Panticosa, a 2 minutos de Biescas y a 5 minutos de Las Margas Golf Club, a 30 min. Del Parque Nacional de Ordesa, en un pueblo encantador junto al Gállego, Lárrede, se encuentra el hotel Viñas de Lárrede, bajo un precioso torreón vigía y frente a la joya del románico, la Iglesia de San Pedro.
Su bella fachada de amplios ventanales, sobre una construcción donde predominan los materiales nobles como la madera y la piedra de recuperación, ofrecen unas vistas espectaculares al Pirineo y al valle, en un espacio de paz y tranquilidad en plena naturaleza. En el jardín, su huerto, su piscina exterior (según temporada) y sus rincones para detenerse en el tiempo con un buen libro y disfrutar de las puestas de sol.
Salón con chimenea para los meses de invierno, terrazas para disfrutar del buen tiempo observando el maravilloso paisaje natural. El porche un rincón distinguido y acogedor. Magnífico restaurante dirigido por nuestro chef Toni Polca que le ofrece excelentes platos basados en los productos de la propia finca. Nuestro acogedor comedor le espera para degustar un delicioso desayuno, saborear platos muy especiales y descubrir productos de máxima calidad en un marco inigualable, o una cena bajo las estrellas. Nuestro spa, con bañera de hidromasaje, hamman y duchas de contraste de aguas y USO EXCLUSIVO PARA MAYORES DE 16 AÑOS.
Opiniones sobre el Hotel Viñas de Lárrede
Decepción total!! Expectativas demasiado altas. Antes de explicar nuestra experiencia, cabe destacar la excelente atención recibida por parte del personal del hotel desde el minuto uno y lo precioso que es el hotel, una cosa no quita la otra. Quería sorprender a mi pareja por su cumpleaños, vi este hotel que me pareció precioso y como la ocasión lo merecía estaba dispuesta a pagar 200€ la noche, pensando también que por ese precio la habitación sería de calidad superior a las de un hotel más económico. Contacté con el hotel para hacer varias consultas (siempre me atendieron de manera rápida y excepcional) y entre ellas era el tema de la insonorización de las habitaciones y me confirmaron que sí lo estaban... pues nada más lejos de la realidad, ya el primer día se escuchaban conversaciones y las teclas de la luz de la habitación de al lado, pero intentamos no darle mucha importancia, hasta el día siguiente que no suficiente con eso empezamos a escuchar gemidos, que por otro lado es maravilloso pero también algo íntimo, y si precisamente insistí en el tema de la insonorización era para evitar precisamente esto, no pedía que fuera un monasterio como bien me respondieron ??, pero si inicialmente lo pregunté era porque para nosotros el descanso es algo muy importante, que si estaba dispuesta a pagar ese dineral por noche era para evitar tener ruidos que existen en hoteles de 80/100€, porque para escuchar a los de al lado, para eso me quedo en mi casa. Cierto es que comenté la situación y rápidamente me ofrecieron otra habitación, pero sabemos que todas serían iguales y la decepción ya la teníamos encima ?????. A pesar de la situación, nos negaron la posibilidad de devolvernos la parte proporcional del dinero de esa noche+desayuno pero aún así decidimos irnos a Barcelona de noche. No suficiente con eso, nos cobraron los 20€ de las bebidas del día anterior, no perdonaron ni eso. Hay veces que no todo vale, hay que tener un poco más de empatía y cuando es necesario dejar a un lado la política de empresa y más cuando se está ofreciendo un servicio que no es real. Para nosotros la decepción hubiera sido menos amarga y esta reseña no hubiera existido. Hay veces que los detalles marcan la diferencia... Pero bueno, en estos casos uno se da cuenta que cada vez existe menos humanidad.
Ha sido un placer una vez más. La atención siempre es inmejorable, todo el equipo siempre atentos, serviciales, respetuosos y amables. Viajamos frecuente y podemos decir con total sinceridad que este hotel es de los mejores que nos hemos alojado, somos clientes habituales y nos encanta repetir siempre que estamos por la zona. De nuevo agradecer a Aitor, Maria, Andrea, Toni, Joaquín, Ana y a todo el resto del equipo, nos hacen sentir como en casa.
Hemos pasado el fin de año y nos ha encantado todo. El hotel es una preciosidad, muy bien ubicado, la habitación muy silenciosa con una cama súper cómoda. El restaurante de 10, una cena espectacular y los desayunos exquisitos con productos de calidad. Recomendable 100%
Hemos ido a comer al restaurante mi pareja y yo. De principio a fin ha sido una experiencia increíble. De la comida no hay nada que decir. Mis dieces a quién cocine, y también a los camareros por su impecable atención y amabilidad. Los precios se adecúan a la calidad de los productos y a su sabor. No os podeis perder la tarta de queso, extraordinaria. Muy contentos y sin duda repetiremos.
Pasamos la última semana del año aquí. La ubicación es muy buena para hacer trekking por la zona y para ir a esquiar. El desayuno riquísimo y variado. La cama muy cómoda y la calefacción perfecto. El personal muy amable nos recomendaron varios trekking para hacer por allí.